Los dispositivos alimentados por baterías de iones de litio se están sobrecalentando con más frecuencia durante los vuelos de las aerolíneas, y los pasajeros suelen meterlos en maletas documentadas que van a la bodega de carga, donde un incendio podría no ser detectado tan rápidamente.
Los incidentes de sobrecalentamiento aumentaron un 28 % de 2019 a 2023, aunque tales incidentes siguen siendo relativamente inusuales, dijo la empresa de consultoría UL Standards & Engagement en un reporte publicado el lunes.
Los cigarrillos electrónicos se sobrecalentaron más seguido que cualquier otro dispositivo, de acuerdo con el reporte.
En 60 % de los casos, el sobrecalentamiento —llamado fuga térmica— se produjo cerca del asiento del pasajero que llevó consigo el dispositivo.
En julio, una computadora humeante que estaba en el bolso de un pasajero provocó la evacuación de un avión que esperaba despegar en el Aeropuerto Internacional de San Francisco. El año pasado, un vuelo de Dallas a Orlando, Florida, hizo un aterrizaje de emergencia en Jacksonville, Florida, luego que una batería se incendió en un compartimento superior.
Más de una cuarta parte de los pasajeros encuestados para el estudio señalaron que pusieron sus cigarrillos electrónicos y cargadores portátiles en sus maletas documentadas. Eso va en contra de las normas federales.
La Administración de Seguridad en el Transporte prohíbe los cigarrillos electrónicos y los cargadores y las baterías externas con baterías de iones en las maletas documentadas, pero los permite en el equipaje de mano. La norma existe precisamente porque los incendios en la bodega de carga podrían ser más difíciles de detectar y extinguir.
UL Standards & Engagement, parte de una empresa dedicada a la ciencia de la seguridad conocida en su día como Underwriters Laboratories, dijo que basaba sus conclusiones en los datos de 35 aerolíneas de pasajeros y de carga, entre ellas nueve de las 10 principales compañías aéreas de pasajeros de Estados Unidos.
Hasta el 15 de agosto de este año, la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) ha registrado 37 incidentes de fugas térmicas en aviones. El año pasado hubo 77 informes, un aumento del 71 % con respecto a 2019, según las cifras de la FAA.
Teniendo en cuenta que las aerolíneas operan alrededor de 180.000 vuelos estadounidenses cada semana, los incidentes en el aire son relativamente poco comunes, y las baterías de litio pueden sobrecalentarse en cualquier lugar.
Redacción: Voz de América.